¿recuerdas aquella noche?
¿Aquel encuentro aún está en tu memoria? La noche fría y el pasto húmedo aún está en mis labios, aun siento el sabor en mis dedos de la pasión con que me abrigaste aquella mágica noche. El camino de rocas separa nuestras pieles, los deseos sobrepasan las dificultosas escarpes que resguardan tus pasos, lodo y fango, frío y lluvia no alcanzan a frenar el motor indómito de mis fantasías en tu ser… Los astros fraguan destellos, tu determinación comienza la ignición en mi corazón cuando leo tu mensaje, aquella cita a la que aceptas agua mis latidos como nunca nadie lo ha hecho… Mis llaves delatan el afán de tomarte, acudo por mi corcel blanco en pro de tu cercanía, recorro las calles vacías en donde las sombras de la noche juegan con el brillo del asfalto bañado por los cielos, los mismos que hoy me brindan la oportunidad de realizar el sueño de tenerte, colinas y valles son dejados atrás por mis pasos hasta que el destello de tu sonrisa, el brillo de tu mirada y el aroma que