Tu comienzo, mi hermosa universitaria.
Tu comienzo. Aunque lágrimas bañen tus mejillas y las mías no salgan del invierno que causa que los kilómetros disten nuestros cuerpos la fortaleza de cada sonrisa que buscas a cada paso alienta mi espera y mengua mi desesperación y angustia por no tocarte. Hoy partes cielo mio a un mundo déspota donde no puedo protegerte en físico, donde tu inocencia tendrán que leer la mente de aquellas intenciones que buscan alcanzarte. Y pareces con el ocaso, que no la fría tarde que dejas cuando ciprés tu piel. Hoy, más que nunca, cuando el tiempo pone retos a nuestro amor, siento aquel despreciado por otras corazón desbordarse en pasión y anhelos, fantasías y códigos as noches que rebozan de tu nombre… De tus recuerdos. No puedo ni quiero ocultar el orgullo que me da por fin saberte capaz de enfrentar tu mundo y salir avante con la dedicación que mostráste a nuestra relación, no podría aunque quisiera negar que verte enfrentar tu camino universitario moja mi mirada de orgullo y