Un baño de devoción.
Entre mis dedos se escurre como espesas pasiones mi clamor por tu piel... Aun la luna no declina su hegemonía lumínica y tu nombre ya ha sido bañado un par antes de esta por mi necesidad de ti en medio de esta ausencia. pocas veces han visto otros ojos mi empeño en recorrer cada una de tus recónditas esferas, solo tu, la dueña de mis deseos, me ha dado el placer de entregarte todo mi amor y bañar tu morena piel con el pálido y tibio amor de mis entrañas. Cada noche en tu ausencia, alejado del mundo gris que me agobia aquel retrato de tu cabello colindante entre colinas aviva el sueño de mis pasiones. Fuerte es mi sentir entonces al recibir cada uno de tus retratos, que hábilmente preparas para mis pupilas, cada una de ellas hidrata mis dedos aferrados al recuerdo de tus labios, formas sin pudor que promueve mi desenfreno. Oscilantes ires y venires de mi destreza transfigurándose a cada abatir en la proyección imaginaria de tu garganta, profundamente virtuosa. Puesta en m