18 meses: ¡La Constante de ti!
Es tu nombre constante en el eco tras mis ojos...es tu piel el anhelo de estos labios que sucumben ante mis lentes cuando es tu aroma el que regresa con el suspiro de tus anhelos…
Eres tu mi mayor fascinación, todo lo que revuelve esta inmensa colección de defectos que devotos todos son de los tuyos, anhelo hoy tenerte como cada noche en mis sueños o incluso, así fuera vestida, disfrutaría de los segundos a tu lado, respirando de tu aroma y no viendo más que las fantasías que me muestran el brillo de tu ojos y tus labios rojos cuando soy presa de ellos…
La Constante en mi latir son tus letras, la constante de ti sostiene viva la pasión que despertarte aquel 17 de noviembre en donde la intrépida huida en medio de una noche de estrellas, cual éxodo, me llevaste en génesis a conocer el infinito placer de tu sabor con el que he construido cada una de mis fantasías, cientos de miles por cierto, todas a tu nombre, aquel que ha sido lo único constante en mi ser!
Ya las estrellas conocen mis plegarias cuando suspiro por tu aroma, ya la luna brilla casi tanto como tu sonrisa de delicada princesa, ya el viento de la noche obedece mi deseo de perseguir el recorrido imaginario de mis dedos bajo tu falda, ya el aroma del jazmín que tantas veces nos ha bañado la piel se ha fijado en mis recuerdos a tal punto de susurrar tu nombre y tratar de alcanzarte con mis brazos con ojos cerrados cuando en la noche, en mis sueños, me invaden las ansias de hablarte en mi regazo, ya son tantos momentos intangible mente bellos, majestuosos y apasionados que parece mi mente no hubiera grabado alguno similar pues no hay espacio en ella para felicidad que no se. Ligue a tu nombre, ni pasión que no se adhiera a tu piel y así menos amor que no sienta por ti.
Te he amado constante e incesante mente, te he deseado con fuertes ansias antes, durante y después de tenerte, y he vivido feliz tan solo luego de haberte hallado en aquel noviembre noctámbulo que hacía de los amantes uno solo y de allí en adelante me ha hecho feliz con tal pasión y amor que inigualable a alguna pueda recordar.
La Constante de ti, tenerte en cada segundo, suspiro y latido, saberme para ti, saberte para mí, es mi mayor felicidad, la constante de ti han de ser mis pasiones.
La Constante en mi latir son tus letras, la constante de ti sostiene viva la pasión que despertarte aquel 17 de noviembre en donde la intrépida huida en medio de una noche de estrellas, cual éxodo, me llevaste en génesis a conocer el infinito placer de tu sabor con el que he construido cada una de mis fantasías, cientos de miles por cierto, todas a tu nombre, aquel que ha sido lo único constante en mi ser!
Ya las estrellas conocen mis plegarias cuando suspiro por tu aroma, ya la luna brilla casi tanto como tu sonrisa de delicada princesa, ya el viento de la noche obedece mi deseo de perseguir el recorrido imaginario de mis dedos bajo tu falda, ya el aroma del jazmín que tantas veces nos ha bañado la piel se ha fijado en mis recuerdos a tal punto de susurrar tu nombre y tratar de alcanzarte con mis brazos con ojos cerrados cuando en la noche, en mis sueños, me invaden las ansias de hablarte en mi regazo, ya son tantos momentos intangible mente bellos, majestuosos y apasionados que parece mi mente no hubiera grabado alguno similar pues no hay espacio en ella para felicidad que no se. Ligue a tu nombre, ni pasión que no se adhiera a tu piel y así menos amor que no sienta por ti.
Te he amado constante e incesante mente, te he deseado con fuertes ansias antes, durante y después de tenerte, y he vivido feliz tan solo luego de haberte hallado en aquel noviembre noctámbulo que hacía de los amantes uno solo y de allí en adelante me ha hecho feliz con tal pasión y amor que inigualable a alguna pueda recordar.
La Constante de ti, tenerte en cada segundo, suspiro y latido, saberme para ti, saberte para mí, es mi mayor felicidad, la constante de ti han de ser mis pasiones.
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