Tanto he esperado.. Que aprendí a olvidar

Cada gota que bañó de pasión tus montañas ahora se ausenta en nuevas fuentes...
Soy animal de costumbre al que el olvido del fracaso recuerda, soy aquel que anhelante despierta de su sueño y más tarde concluye en solitarios humos de otros perfumes el sentir inulmen de tu gemir. Vacíos y aterradamente solos mis pasos guiados por la inercia de los recuerdo a través del desierto que tu ausencia labra se abren pasos en medio de la evidencia, cruel realidad, del apasionado y excitado sentir ahora ajeno de tu motivación.
Soy lo que antes temí ser y apenas me resigno al tracegar sin razon de mi mirar, no temo el futuro incierto sino más bien el colorido pasado al que me resistí hasta ahora liberar.
Hace ya lustroso en los que los juramentos a dioses errados marcaron experiencias funestas que ahora son realidades aun más dolorosas...
Aguardo por no ser entonces quien acepte las disculpas y afano mi paso a la frustración de la aceptación de la conmutación de pasiones..
He visto felicidad y dolor, he visto ese brillo en tus ojos antes y ahora, cuando lo motivaba y ahora que no.
No escondo el dolor pero reconozco la satisfacción de ver uno de ambos antes uno sentir el palpitar de la cacería de sentimientos... Aunque acudan a otras pieles... Jamás lo sabré, así como nunca te darás cuenta de este desde ahora perpetuo dolor.
(procura ahora en vez no desconocer el asincrónico exclamar de mi sufrir a bien sea luego de otro)




http://open.spotify.com/track/0t9Jd84JnsV8HRMaQzHUom

Comentarios

Entradas populares de este blog

De fuego reprimido

De nuevo al fango pero al menos no olvido tu nombre.

Rúben (cuento), Luis Britto