Sex-bullying: un acto de hipócritas.

El domingo 8 de abril en un programa de televisión ( no recuerdo su nombre) se expuso el Sexting como delito, y en mi opinión se sacraliza a la victima de este y no se hace mayor referencia al acto desleal de abuso de confianza y divulgación de material privado sin autorización que si es un delito ni referencia alguna a la posición hipócrita de la sociedad y moralización indebida de las libertades humanas.
Espero que en un programa de ese corte no se tome posición y que se evidencie todo tipo de visión sin marcar una conclusión que limite las libertades ciudadanas.
A manera de ilustración les comparto unas letras que muestran la postura que no se evidenció en el reportaje que a mi parecer cuestionaba el acto libre de compartir su cuerpo con su par por medio de las tics haciéndole ver como que ellos son culpables de su infortunio posterior por la mezquindad de quien no honró la confianza que se le dio.


Sex-bullying: un acto de hipócritas.

Las nuevas tecnologías expanden y diversifican las formas cómo los humanos se desarrollan en sociedad, transforman las relaciones sociales y diversifican las maneras como se interactúa entre individuos.
El sexting es un fenómeno social en trasciende a lo íntimo, es la práctica personal, íntima y libre de una persona que intercambia mensajes manifestando sus pasiones más íntimas y puras y para ello intercambia mensajes escritos y archivos audiovisuales poniendo de manifiesto sus pasiones y disfrutando libremente de su sexualidad con quien considere satisfactorio.
En súltimas es un simple y natural relacionamiento sexual libre entre personas conscientes de su sexualidad salvo la mediación de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación bien sea como medio de comunicación o de apoyo fetichista al registro audiovisual.
Previendo un ceño fruncido por la palabra fetichista aclaro que esta es usada para resaltar la fascinación especial del ser humano por ser reconocido en sociedad y por ello el verse o ver a quien desea en los medios de comunicación así sea de manera privada y no masiva le genera mayor satisfacción y placer.
Ahora bien, tristemente para muchos esta práctica tiene muchos riesgos, de ser expuestos en nuestra intimidad por hacer públicos estos mensajes escritos y audiovisuales, sometiendo al escarnio público la intimidad natural del ser e incluso hasta arriesgar la estabilidad laboral por presentar un comportamiento inmoral, riesgos como ser señalados por estas prácticas e incluso del detrimento de la dignidad personal. En esta práctica genera información privada, se registra la intimidad y por ello la publicación de la misma expone al involucrado al señalamiento de ciertas personas abanderadas de la moral.
Pero a este nivel reclamo sensatez, madurez, respeto y ante todo respeto por quienes podamos ser expuestos en nuestra intimidad (ósea todos quienes exploramos nuestra privacidad libremente de una manera consciente e irreprimida).
En primer lugar, no creo que una persona registre su intimidad con la intención de hacerla pública, si con la intención de compartirla con quien su deseo es mutuo y con quien le brinda la confianza y libertad de hacerlo, no creo de igual manera que alguien crea que un individuo no disfrute de su sexualidad en su círculo de privacidad.
Es una falta de respeto que aquellas personas que se desnudan en letras y versos, o ante micrófonos o la cámara sean tachadas de ingenuos e inmortales, es una frenta a la razón el que quien es señalado de inmoral por disfrutar de su intimidad sea la víctima de la bajeza de un ser mentiroso y sin principios morales y miserable acto que le procede al engaño y falta a la confianza dada ( mil disculpas pero no encuentro maneras lindas de deducirle a quien expone la privacidad ajena que es un hijo de puta sin principios ni honor, inmundo desgraciado falto de valor y sin respeto por quien confió en él).
Ofende el hecho que la exposición de la privacidad y sexualidad de quien practica el Sexting le condene como víctima, el envío de un mensaje o archivo audiovisual propio no constituye un delito, más sí lo es la divulgación inconsulta, inapropiada o desautorizada de esta información, el sexting es la práctica, que puede derivar en delito cuando se trafica o extorsiona con esta información y estos son los criminales pero esta sociedad hipócrita criminaliza a la víctima.
Son los hipócritas los que sacralizan, criminalizan, señalan, acosan y carcomen el buen nombre de la víctima, son los hipócritas que se niegan a sí mismos que el humano es un ser sexuado, que disfruta de su sexo y sus fantasías, desconocen que hasta la persona más ajena a los cánones de belleza posee un cuerpo que requiere su sexualidad, que todos de alguna manera disfrutamos del cuerpo y que por más ilustres, inmáculos, dueños de apellidos o puestos reconocidos todos somos sexuados y aunque a muchos les cause repudio tenga presente que usted que lee tiene un padre y una madre que alguna vez sintieron algo en medio del sexo y que si se revelase ese acto no cambiaría en nada el sentimiento que estos por usted sienten ni cambiarían las capacidades de los que le involucren.
Ustedes hipócritas que se escandalizan por alguna foto filtrada ilegalmente de alguna persona tengan en cuenta que esa persona es la víctima, no la victimaria, es quien fue vulnerada en su buena fe por una persona casi tan miserable como usted que en vez de apoyar a la víctima la señala de inmortal por sentir como lo hacen todos los humanos.
A ustedes hipócritas se les hace imperdonable que halla alguien podido desnudar sus sentimientos ante alguien más que guardó evidencia para hacer mella en su buen nombre pero no entienden que son los hipócritas como ustedes los que le dan ese poder a aquel victimario desgraciado que abusa de ese material para lograr su cometido. Ustedes hipócritas con su señalamiento hacen que las personas sin principios (quizás por parecerse a ustedes le apoyan) hagan de un acto natural un escándalo inmensurable, ustedes hipócritas sin valor son quienes con su señalamiento de inmoralidad los que hacen víctima a aquel ser que confió en quien le falló y quien es solo responsable de disfrutar su sexualidad.
No olviden que las personas no son más o menos por desnudarse o mantener sus prendas, que hasta sus abuelas y abuelos fornicaron y que eso no las hace menos dignas, que todos en nuestra intimidad tenemos placeres tanto sexuales como corpóreos y que cuando en un acto de irrespeto y falta a la confianza se hace pública la intimidad es a quien señalas una víctima y no tiene por qué sufrir aún más vulneración con tu señalamiento.
Entiendo que la moral es importante, en mi opinión tan solo para las personas hipócritas, pero la desnudez no afecta para nada la integridad de una persona, quizás unas frases sensuales o imágenes o audios  eroticos del papa catolico puedan ser traumáticos debido a la verborrea que esa religión proclama acerca del control del instinto natural pero en qué puede afectar que una mujer o un hombre indiferente de su género comparta su sexo libremente con quien le satisface en deseo?

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